Desde marzo de 2020, con el inicio de la pandemia, los riesgos psicosociales en el trabajo han aumentado de manera significativa. Hablamos de una serie de estados y situaciones que afectan negativamente a la salud de los trabajadores, tanto a nivel físico como psicológico, alterando sus procesos emocionales, conductuales y cognitivos.

A continuación vamos a ver cuáles son los principales tipos de riesgos psicosociales en el trabajo y sus manifestaciones.

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¿Qué son los riesgos psicosociales?

Los expertos en prevención de riesgos laborales (PRL) definen los riesgos psicosociales como los factores de organización del trabajo que ponen en riesgo la salud de los profesionales. Pueden generar respuestas de diferentes tipos:

  • Fisiológico o ergonómico, como el dolor lumbar o cervical, por ejemplo.
  • Emocional, como la apatía, la ansiedad o la depresión.
  • Cognitivo, como la mala concentración o la dificultad en la toma de decisiones.
  • Conductual, con el abuso de sustancias o la violencia, tanto verbal como física.

Por lo general, estos factores de riesgo psicosocial en el trabajo se mantienen en el tiempo, ya sea de forma intermitente o continua.

Características comunes de los riesgos psicosociales

Dentro de los tipos de riesgos laborales, para que una situación se considere como un riesgo psicosocial en el trabajo debe responder a unas premisas:

  • Debe extenderse en el tiempo.
  • Carga de trabajo inadecuada (por ser poca o ser mucha).
  • Desempeñar un rol en la organización que no es el que le corresponde.
  • No tener control sobre el trabajo.
  • No se puede cuantificar.
  • Afecta a otros riesgos, tales como los ergonómicos o los higiénicos.

El gran problema de estas situaciones es que tienen una difícil intervención, puesto que no se ven a simple vista, y la cobertura legal, por tanto, es escasa.

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Tipos de riesgos psicosociales en el trabajo

Aunque no los conozcas como riesgos psicosociales, sí que habrás oído hablar de estas situaciones en la prensa o en internet. Su popularización en los últimos años, unida a la importancia que se le da ahora a la salud mental, ha hecho que cada vez más trabajadores denuncien estas situaciones y pidan ayuda.

A continuación, te explicamos cuáles son los principales tipos de riesgos psicosociales que se dan en el trabajo, sobre los cuales, tanto las empresas como los trabajadores, deben contar con los recursos suficientes para identificarlos y solucionarlos de forma efectiva y temprana.

El estrés laboral

El estrés laboral se da en forma de reacciones emocionales, conductuales cognitivas y fisiológicas producidas por cuestiones de organización, ambiente o contenido del trabajo. La persona que lo sufre siente que se le exige una rápida respuesta, que tiene sensación de no poder afrontar.

Sufrir estrés en el trabajo afecta a diversos ámbitos de la salud y de la vida del individuo. Entre ellos, podemos señalar problemas de abuso de sustancias, cardiovasculares, musculoesqueléticos, psicosomáticos o mentales.

El síndrome del trabajador quemado o burnout

El burnout (síndrome del trabajador quemado) es un estado de estrés cronificado como consecuencia de unas malas condiciones psicosociales en el trabajo. Los principales síntomas son la baja realización personal en el trabajo, el agotamiento laboral y la despersonalización.

Para evitar este tipo de situaciones, la empresa puede seguir una serie de pautas, como favorecer y fortalecer los vínculos interpersonales entre los miembros del equipo, probar técnicas de desarrollo laboral y mejorar las opciones de acogida y formación continua de los trabajadores.

El tecnoestrés

El estado psicológico negativo relacionado con el uso de nuevas tecnologías se conoce como tecnoestrés y puede clasificarse en:

  • Tecnoansiedad: sensaciones negativas ante el uso de herramientas TIC.
  • Tecnofatiga: cansancio mental por el uso de las TIC.
  • Tecnoadicción: al extender el uso de esas herramientas en todo momento.

Fatiga provocada por el trabajo

Los trabajadores con mayor presión laboral pueden desarrollar fatiga como consecuencia del trabajo. En la mayoría de los casos, esta desaparece con un descanso adecuado, pero si no se ataja, puede llegar a provocar falta de rendimiento, mayor absentismo y problemas con la eficiencia del trabajador.

Violencia y acoso laboral

La violencia o el acoso, incluido el sexual, representan uno de los riesgos psicosociales más graves. Ante situaciones de este tipo, es labor de la dirección y los responsables de cada departamento identificarlas y darles solución en el menor tiempo posible.

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